El control de plagas en la industria alimentaria es un requisito fundamental para garantizar la seguridad del producto final. No basta con eliminar insectos o roedores de forma puntual, sino que es necesario implementar un enfoque sistemático, preventivo y documentado.
Aquí es donde entra en juego el control integrado de plagas (CIP), especialmente relevante en las auditorías de normas como IFS o BRC, donde las no conformidades en este ámbito pueden poner en riesgo la certificación. Por todo ello, en este artículo de CSA Seguridad Alimentaria te contamos todos los detalles.
¿Qué es el control integrado de plagas en industrias alimentarias?
El control integrado de plagas es una estrategia que combina medidas físicas, químicas y biológicas para prevenir, monitorizar y controlar la presencia de plagas en instalaciones alimentarias.
Su objetivo no es solo eliminar plagas visibles, sino evitar que lleguen a establecerse. Para ello, se basa en principios como la prevención estructural (sellado de accesos, limpieza, orden), el seguimiento mediante puntos de control estratégicos, el uso de productos biocidas de forma racional y segura, y la formación del personal.
Cabe destacar que este sistema debe estar documentado, validado y adaptado a las características específicas de cada planta. Además, debe contar con la colaboración de un proveedor homologado, con personal cualificado y registros que acrediten cada acción realizada.
Cómo evitar no conformidades en auditorías IFS/BRC
Para evitar no conformidades en auditorías IFS o BRC, es fundamental demostrar que el plan de control de plagas es eficaz, sistemático y está bien documentado. Por ejemplo, debe tener planos actualizados con los puntos de control identificados, fichas técnicas y de seguridad de los productos utilizados, informes de seguimiento y acciones correctivas claras ante cualquier indicio de actividad.
Además, es crucial que el personal esté formado en buenas prácticas de higiene y sepa cómo actuar ante una detección. Ten en cuenta que un sistema de control de plagas bien gestionado no solo evita sanciones o pérdidas de producto, sino que protege la reputación y la viabilidad del negocio.
En definitiva, estos aspectos son fundamentales para el control de plagas en industrias alimentarias. Ante cualquier duda en este aspecto, no dudes en ponerte en contacto con CSA Seguridad Alimentaria. ¡Es un punto crucial en tu negocio!