La limpieza y desinfección de manos es fundamental en la industria alimentaria. Los manipuladores deben tener claras las normas de higiene que deben implementar durante la preparación y elaboración de los productos alimenticios. De lo contrario, las consecuencias pueden ser muy graves para nuestro negocio y para el consumidor. Conoce las claves para hacerlo correctamente:
¿Por qué debemos limpiar y desinfectar nuestras manos?
Si lo hacemos adecuadamente conseguiremos evitar contaminaciones cruzadas, intoxicaciones alimentarias provocadas en los consumidores por bacterias patógenas e infecciones que se transmitan a través de los gérmenes a los alimentos.
Así, al manipular alimentos con las manos limpias evitaremos que el cliente enferme por consumir productos contaminados.
¿Cuándo debo limpiar y desinfectar mis manos?
La respuesta está clara: tantas veces como lo necesites. Pero pongamos algunos ejemplos para que seas consciente de en qué situaciones de tu día a día debes lavar bien las manos:
- Antes de empezar a trabajar y tocar cualquier alimento.
- Después de hacer un descanso.
- Tras ir al baño.
- Cuando manipules distintos alimentos, especialmente si unos están ya cocinados y otros crudos como el pescado, la carne y huevos.
- Si tienes contacto con basura, residuos o desperdicios.
- Después de comer o almorzar.
- Si toses, estornudas o te suenas, es decir, después de tocarte la nariz o la boca.
- Cuando hayas fumado.
- Después de atender el teléfono.
- Si tocas dinero.
- Tras quitarte los guantes, si los usas.
- En cualquier otra circunstancia donde el sentido común lo recomiende, aunque no esté reflejado en este listado.
¿Cómo debo realizar la limpieza y desinfección de manos?
Dirígete al lavamanos que deberá estar equipado con agua fría y caliente, jabón, desinfectante, toallas desechables o papel. A continuación, sigue estos pasos:
- Humedece manos y antebrazos hasta el codo. Para ello, despréndete de objetos personales y joyas como anillos, esclavas, pulseras o relojes. Mójate estas zonas bajo el grifo.
- Aplica jabón y frota con energía hasta que salga espuma entre los dedos, las yemas, la palma y dorso de la mano, las muñecas y uñas.
- Aclara el jabón con abundante agua hasta que desaparezca por completo.
- Seca las manos con papel o una toalla seca y desechable. Los secadores de aire no son tan recomendables porque suele ocurrir que el usuario se impacienta y termina secándose las manos en el uniforme.
- Para terminar, aplica un desinfectante con alcohol. Será la parte más importante de este proceso.
Con nuestros productos de limpieza y desinfección de manos listos para su uso en la industria alimentaria conseguirás el resultado que esperas. Recuerda que hacerlo correctamente está, nunca mejor dicho, en tus manos. Y en CSA Consultores con nuestro servicio integral de higiene podemos ayudarte.
Gracias por la información, me fue de mucha utilidad.