Los colorantes son muy útiles para hacer más atractiva la comida. Sin embargo, algunos colorantes alimentarios son peligrosos para la salud, así que en este artículo de CSA te vamos a contar todos los detalles sobre este tema. ¡Vamos allá!
La tartracina es un colorante alimentario peligroso
Uno de los colorantes más usados en la comida es la tartracina y puede llegar a ser peligroso para la salud. Se trata de un colorante artificial de origen químico que se usa en numerosos alimentos, como helados, chicles, cereales industriales, caramelos, palomitas de maíz y dulces de repostería.
Además, también es muy común en bebidas, como los refrescos, bebidas alcohólicas, bebidas energéticas y bebidas isotónicas. Por último, la tartracina también se puede encontrar en algunas mostazas y mayonesas y en los condimentos para las paellas.
Para saber si un producto lleva tartracina, puedes buscar en la etiqueta del producto la indicación E102 o Amarillo 5. ¿Y por qué es peligrosa la tartracina? Porque puede provocar reacciones alérgicas de tipo dermatológico y respiratorio y está fuertemente asociado al TDAH (Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad).
Otros colorantes alimentarios que pueden ser peligrosos
Otros aditivos con los que hay que tener cuidado son el benzoato de sodio, el benzoato de potasio, el benzoato de calcio y del ácido benzoico, que se identifican en las etiquetas con las indicaciones E211, E210, E213 y E212.
Asimismo, el colorante del caramelo, que es el E150, puede impedir la absorción de la vitamina B6, lo que puede provocar molestias intestinales. Por otro lado, el aditivo azul de antraquinona y el azul patente V pueden desencadenar diferentes reacciones alérgicas. Para terminar, los espesantes de carragenano, el óxido de titanio y los pigmentos derivados del petróleo también son peligrosos.
En definitiva, lo mejor es que prestes mucha atención a las etiquetas de los productos que compras para comprobar si contienen colorantes alimentarios peligrosos. Y, ante cualquier duda, lo más recomendable es que lo consultes con un profesional.