Las residencias de mayores son entornos especialmente sensibles frente a la legionela, debido a la vulnerabilidad de los residentes y a la presencia de sistemas de agua caliente sanitaria, climatización o terapia respiratoria que pueden favorecer su proliferación.

Adaptarse a la normativa actual es imprescindible, pero muchas veces se teme que esto implique detener la actividad del centro. Afortunadamente, es posible cumplir con los requisitos legales sin interrumpir el funcionamiento diario si se planifica de forma adecuada. ¡En este artículo de CSA Seguridad Alimentaria te damos algunos consejos!

Realiza una evaluación de riesgos personalizada

Antes de realizar cualquier intervención, es fundamental llevar a cabo una evaluación de riesgos de las instalaciones, identificando puntos críticos como acumuladores, duchas, grifos, torres de refrigeración o equipos de aerosolterapia. Esta evaluación permite planificar las actuaciones sin interferir en las zonas habitadas y priorizar las medidas más urgentes.

Programa las intervenciones por fases

Para evitar interrupciones, lo ideal es organizar los trabajos en fases coordinadas, actuando por zonas y fuera del horario de mayor uso de las instalaciones. Por ejemplo, la limpieza y desinfección de depósitos o circuitos de agua caliente puede realizarse por la noche o en fines de semana, minimizando el impacto sobre residentes y personal.

Instala sistemas de control y mantenimiento sin afectar al servicio

Hoy en día existen equipos de dosificación, sistemas de cloración continua y sensores de temperatura que se pueden instalar sin necesidad de cortar el suministro. Estos sistemas permiten un control constante de la calidad del agua y ayudan a prevenir la proliferación de la bacteria sin modificar el uso habitual de las instalaciones.

Forma al personal y establece protocolos claros

Una parte esencial del control de la legionela es la implicación del personal del centro. Establecer protocolos de limpieza, purga de grifos y duchas y registrar incidencias ayuda a mantener el sistema bajo control sin alterar el día a día de la residencia. La formación es clave para una prevención eficaz y sin sobresaltos.

En resumen, estos son algunos consejos útiles para adaptar una residencia de mayores a la normativa de legionela actual sin parar la actividad. Si necesitas ayuda profesional para realizar este proceso, en CSA Seguridad Alimentaria estaremos encantados de ayudarte.

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