La trazabilidad es muy importante en la industria de los alimentos ya que es un pilar de la seguridad alimentaria y permite ante una alarma detectar el foco del problema. Pero para entender su importancia hay que conocer qué es.
¿Qué es la trazabilidad alimentaria?
La trazabilidad alimentaria es la capacidad de realizar el seguimiento de un alimento a lo largo de toda la cadena de producción, desde su producción y manipulación hasta su distribución.
¿Qué utilidad tiene?
Lo que se consigue con este mecanismo es lo siguiente:
- En caso de emergencia alimentaria facilita la retirada de un producto del mercado. Si se detectase, por ejemplo, un problema de esterilización se sabría de forma precisa y exacta cuáles son los lotes de alimentos afectados y dónde está el origen del problema.
- Proporcionar a los consumidores la información sobre su origen y manipulación. Un ejemplo de esto serían los productos ecológicos o los huevos de gallina de corral. En la etiqueta se puede ver el origen de estos.
- Certificar la calidad de los productos ya que al conocer todo el proceso se puede conocer mejor los ingredientes que lo componen y su procedencia.
- Garantizar la seguridad alimentaria ya que un producto será seguro si su manipulación ha sido correcta en todos los puntos de la cadena de producción.
Por ello, por ley las empresas están obligadas a cumplir una serie de requisitos específicos de trazabilidad (transmitir una descripción exacta sobre los alimentos, identificación del lote, datos del proveedor…). La legislación que regula esto en España es el Reglamento nº178/2002 del Parlamento Europeo y del Consejo.
Además, contar con un sistema de control de la trazabilidad también aporta beneficios a la empresa, ya que ante una diligencia que suponga un delito contra la salud pública la empresa podrá demostrar su inocencia.
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